A partir del 1 de enero de este año, nueva documentación concerniente al caso del pedófilo, tratante y proxeneta Jeffrey Epstein fue dada a conocer. La jueza Loretta Preska, del tribunal federal para el Distrito sur de Nueva York, conocida en la Argentina por el caso YPF, ordenó que se hagan públicos archivos que se mantenían clasificados, con la identidad de alrededor de 190 personas asociadas a Epstein. Entre los mismos, aparecen más complicados los casos de los ex presidentes Bill Clinton y Donald Trump, el príncipe Andrés de Inglaterra, y magnates como Richard Branson, dueño de Virgin Records.
Los documentos recientemente publicados forman parte de una demanda por difamación presentada en 2015 por Virginia Giuffre, una de las principales denunciantes, contra la pareja y socia de Epstein, Ghislaine Maxwell, hija de un famoso espía del Mossad, Robert Maxwell.
La relación con los servicios de inteligencia israelíes de Epstein, se explica no solo por el modus operandi, típico de sistemas de extorsión, también por la estrecha relación con del proxeneta con ex primeros ministros de Israel, como Ehud Barak, y con el famoso abogado Alan Dershowitz, quien tiene a su cargo la defensa del Estado sionista ante la Corte Penal Internacional de La Haya.
Cabe recordar que Jeffrey Epstein, tras ser detenido y q apareció muerto en el 2019, en una prisión federal en Nueva York, cuando esperaba el juicio por crear una red de tráfico sexual de menores en sus mansiones en la Gran Manzana y Florida, y en su isla privada en las Islas Vírgenes.
A pesar de su condena en 2008 por proxenetismo con una menor en Florida y de estar registrado públicamente como delincuente sexual, el tratante continuó manteniendo sus encuentros con importantes figuras de los Estados Unidos.
Entre las nuevas revelaciones, el ex mandatario de los EEUU Bill Clinton, aparece mencionado en decenas de oportunidades, entre ellas en el testimonio de la testigo Johanna Sjoberg, quien recordó en su declaración de 2016 que Epstein le habló sobre Bill Clinton. La declaración, no por breve es menos reveladora:
P: “¿Jeffrey alguna vez te habló de Bill Clinton?”
R: “Una vez dijo que a Clinton le gustan jóvenes, refiriéndose a las niñas”.
El príncipe Andrew de Inglaterra es otro de los acusados más mencionados en los nuevos documentos dados a conocer. De acuerdo a los mismos, el miembro de la Corona Británica mantuvo “una orgía con numerosas niñas menores de edad” en la isla privada de Jeffrey Epstein, en Islas Vírgenes: “Jane Doe 3 fue obligada a tener relaciones sexuales con este Príncipe cuando era menor de edad en 3 ubicaciones geográficas distintas”.
En otro documento, una testigo relata: “Yo me senté en el regazo de Andrew, puso su mano en mi pecho, y tomaron una foto”.
Alan Dershowitz, como ya se dijo el abogado elegido para representar a Israel ante la Corte Penal Internacional por acusaciones de genocidio en Franja de Gaza, aparece mencionado con una niña que fue obligada a tener sexo en repetidas ocasiones.
El modus operandi de Epstein no es nuevo: ya en los años 90, los servicios de inteligencia de Israel usaban material fílmico sexual para condicionar a las élites norteamericanas, tal y como se revela en la nota del año 2014 de The Times of Israel titulada “Netanyahu said to have offered Lewinsky tapes for Pollard”. Jeffrey Epstein era la cara visible de un sistea de extorsión muy entramado.
Entre los nombres que han ido apareciendo tras la última desclasificación, además de los ya mencionados se encuentra un antiguo asistente de Clinton, Doug Band, y el agente de modelos francés Jean- Luc Brunel, quien al igual que Epstein murió mientras esperaba el juicio; el exgobernador de Nuevo México, Bill Richardson; el multimillonario Glenn Dubin; Tony Figueroa, fundador de Limited Brands y ex director ejecutivo de Victoria’s Secret; Lex Wexner. Un nuevo nombre famoso es el de David Copperfield, quien fue acusado de agredir sexualmente a una modelo adolescente y aparece en los documentos como amigo de Epstein.
Por su parte, Mark Epstein manifestó el pasado miércoles que su hermano Jeffrey le había contado tener información sobre Donald Trump y Bill Clinton tan explosiva que habría obligado a cancelar las elecciones presidenciales de 2016. Mark, de 69 años, dijo al New York Post: “Aquí hay una cita directa: ‘Si dijera lo que sé sobre ambos candidatos, tendrían que cancelar las elecciones’, eso es lo que Jeffrey me dijo en 2016”.
El expresidente Clinton, era amigo de Epstein desde al menos 1993, durante su primer mandato. Epstein realizó al menos 17 visitas a la Casa Blanca. El expresidente también viajó por todo el mundo a bordo del avión de Epstein, realizando viajes a Europa, Asia y África en 2002 y 2003.
Trump, por su parte, habría volado en el jet privado de Epstein siete veces en los años 90, según los registros de vuelo, entre Palm Beach, Florida y Nueva York (no así a la isla privada en Islas Vírgenes), acompañado por miembros de su familia en al menos dos ocasiones.
Ghislaine Maxwell, la socia de Epstein que actualmente se encuentra en prisión por complicidad en su red de tráfico sexual, aseguró que Epstein tenía material audiovisual de Trump y Clinton participando en actividades sexuales con mujeres.
Este lunes 8 de enero, una nueva tanda de documentos judiciales testigos confirman que Jeffrey Epstein grabó videos sexuales del príncipe Andrew de Inglaterra, Bill Clinton y Sir Richard Branson. Así se desprende de los archivos que vienen siendo publicados por orden de la jueza estadounidense Loretta Preska, como parte de la demanda civil previamente resuelta de Giuffre contra Maxwell, que se presentó en 2015.
Sarah Ransome, víctima de Epstein, describió que el príncipe de Inglaterra, el ex presidente de Estados Unidos y el empresario multimillonario dueño de Virgin Records fueron filmados por el pedófilo financiero estadounidense.
Ransome hizo esta declaración antes de que Ghislaine Maxwell fuera sentenciada por tráfico sexual.
La testigo además alegó en los extractos del correo electrónico que el expresidente estadounidense Donald Trump también tuvo relaciones sexuales con “muchas chicas”. “También sé que ella [una amiga de Ransome] tuvo relaciones sexuales con Trump en la mansión de Jeffrey en Nueva York en ocasiones regulares”, escribió la víctima de Epstein.
Frente a los hechos recientemente dados a conocer, Andrew ha negado enérgicamente haber actuado mal y los representantes de Clinton no hicieron comentarios luego de que Sky News difundiera la noticia y les consultara.
El príncipe Andrew se alejó de la vida pública, ya no utiliza su título de SAR tras la polémica sobre su amistad con Epstein, y pagó millones de libras esterlinas para resolver un caso civil con Virginia Giuffre, quien lo acusó de agredirla sexualmente cuando tenía 17 años.
Ransome escribió: “Cuando mi amiga tuvo relaciones sexuales con Clinton, el príncipe Andrés y Richard Branson, se grabaron cintas sexuales”, de hecho, fueron filmados en cada ocasión por separado por Epstein.
“Gracias a Dios logró conseguir algunas imágenes de las cintas sexuales filmadas, que identifican claramente los rostros de Clinton, el Príncipe Andrew y Branson teniendo relaciones sexuales con ella”, agregó. “Es bastante frustrante que Epstein no apareciera en ninguna de las imágenes, ¡pero era así de inteligente! Después de dos horas de intentar convencer a mi amiga de que viniera conmigo, finalmente logré persuadirla para que me enviara algunas de las imágenes de video de ella, que implicaba a los tres hombres mencionados anteriormente”.
“Personalmente puedo confirmar que he visto, con mis propios ojos, la evidencia de estos actos sexuales, que identifica claramente a Bill Clinton, el Príncipe Andrew y Richard Branson teniendo relaciones sexuales con mi amiga”, sostuvo.”Cuando mi amiga finalmente tuvo el coraje de hablar y fue a la policía en 2008 para denunciar lo que había sucedido, no se hizo nada y fue completamente humillada por el departamento de policía donde fue a denunciar lo que había sucedido con Epstein, Clinton, Branson y el Príncipe Andrés”.
Como puede apreciarse, esta criminal red de trata y pedofilia operaba en la cúspide del poder y, adicionalmente al aberrante trafico y explotación sexual de niños, niñas y adolescentes, usaban la misma como anzuelo para encarpetar a pervertidos ricos y famosos con el objeto de luego extorsionarlos a cambio de favores políticos y/o económicos.
En nuestro país, la red de trata liderada por el ex agente de la SIDE, Raúl Martins, operó de manera similar durante una década y media. Hoy esta preso en México y su extradición en trámite por una causa que se tramita en el juzgado de Servini de Cubria, en la que la Alameda es querellante. El otro caso fue el de la “Escuela de Yoga de Buenos Aires” liderada por Juan Percowicz y que operó con protección e impunidad durante más de dos décadas, hasta que fue desbaratada recientemente con 17 procesados que irán a juicio oral. En los tres casos se entremezclan los sótanos de los servicios de inteligencia con las perversas redes de trata y pedofilia, operando, condicionando y extorsionando al poder.