La secretaria adjunta de la Asociación del Personal Jerárquico del Gas en la CTA Autónoma e integrante de La Alameda, Ximena Rattoni, afirmó que la idea es mantener una unidad “en las calles a la hora de los reclamos al Gobierno”.
“Estamos trabajando en la unidad en acciones, caminando mucho. Hoy lo importante es que tenemos un ajuste sobre la cabeza de todos y hay que intentar detenerlo. Para eso debemos tener la unidad concreta del movimiento obrero y así ir caminando juntos para frenar el ajuste, intentar tener respuestas que sean escuchadas por el Gobierno para reactivar la economía”, sostuvo Rattoni.
En declaraciones al programa “La Verdad Concreta”, que conduce el legislador porteño de Bien Común, Gustavo Vera, por la radio online Conexión Abierta, la dirigente gremial sostuvo que la agenda pasa por “discutir las preocupaciones comunes y la necesidad de construir esa medida de fuerza”.
En ese aspecto remarcó que “es importante llegar en unidad de acciones con todas las centrales” a la inminente huelga nacional de octubre, pero aclaró que esa medida de fuerza “no es para plantear cuestiones golpistas, sino para generar un estado de alerta y sacudón al Gobierno para que le permita entender que tiene que sentarse a discutir los problemas de los trabajadores”.
“No tiene otra intencionalidad y lo digo porque al colarse ciertos personajes, muchos aprovechan para plantear que estas son cuestiones golpistas. Muy lejos está eso de lo que queremos nosotros”, indicó.
Respecto de la reunión a la que fueron convocados el viernes pasado en el Ministerio de Trabajo, Rattoni explicó que “la marcha federal” aceleró el pedido que hizo la CTA de Micheli, que fua a la charlas junto con la central de Yasky.
“Planteamos la agenda de los temas más urgentes que son los trabajadores formales, los informales, los desocupados y los jubilados. Pedimos la reapertura de las paritarias, porque se habían cerrado con una expectativa inflacionaria que después terminó siendo superada por la realidad. También solicitamos el cese de los despidos, porque en el ámbito estatal no hubo canales para la reincorporación de trabajadores arbitrariamente despedidos. Y en el medio, el Ministerio de Modernización está tirando que habrá nuevos despidos”, agregó.
Asimismo, señaló que hay “preocupación por parte de las pymes, ya que en el ámbito privado hay más precarización y despidos”, al tiempo que reveló que pidieron “una atención de emergencia para los compañeros que estaban en la informalidad o cobran planes sociales y los jubilados que cobran una mínina que ni siquiera llega al mínimo vital y móvil, que a su vez ya es irrisorio”.
Rattoni explicó que esos planteos junto a la quita del impuesto al salario fueron los que hicieron al ministro de Trabajo, Jorge Triaca, al secretario de Trabajo, Ezequiel Sabor, y al jefe de Gsbinete de esa cartera, Ernesto Leguizamón, pero no recibieron respuestas.
“El Ministerio no tenía ninguna respuesta concreta para resolver ninguno de los pedidos. Dijeron que a ellos también les preocupa el 40 por ciento de trabajadores en la informalidad, el desempleo, pero que en algún momento va a arrancar“, detalló la secretaría adjunta de APJGas.
Además, añadió: “Vemos que el shock de inversiones no vino nunca, a pesar de que fuimos corriendo a pagar en efectivo a los fondos buitre. Tampoco derramó empleo ni mayor salario el sacarle retenciones a los grupos concentrados. Todas la señales que le dio el Gobierno a los grupos empresarios no se ha traducido en una reactivación económica”.
Rattoni cuestionó que los funcionarios de Trabajo pongan “a la inflación como el centro de los problemas y plantean que está bajando, por lo que niegan reabrir las paritarias”.
“Por más que vaya bajando, la inflación ya superó a la paritaria acordada, pero además puede estar bajando por recesión y falta de actividad. Si bien vamos a seguir esperando hasta último momento alguna respuesta, se hace más que evidente la necesidad de construir entre todas la centrales obreras una medida de fuerza”, cerró.