Este martes 22 de mayo, las organizaciones sociales y sindicales que integran la multisectorial 21F rosario se movilizaron con 5 mil personas a las puertas de la delegación local del Ente Nacional Regulador del Gas, para decir basta al tarifazo.
En tres columnas, que partieron desde la Plaza 25 de Mayo, Plaza Montenegro y desde el Sindicato de Recolectores por calle Corrientes llegaron al microcentro de la ciudad para realizar el acto donde leyeron un documento e hicieron uso de la palabra, Ariel Monge por la Alameda Rosario, Eduardo Delmonte por la CCC, el Concejal Eduardo Toniolli el Movimiento Evita, Juan Milito por la Multisectorial contra los Tarifazos, el Sec. Gral. Del Sindicato de Recolectores de Rosario Marcelo Andrada. Edgardo Arrieta Sec. Gral. De Dragado y Balizamiento Rosario y por la UOM Daniel Gutierrez.
Unidad con Justicia Social
Hace muy pocos días fue el 1° de mayo y nos encontró frente a un escenario marcado por una crisis económica, social y política con final incierto producto de desaciertos de los gobernantes que están llevando el país a una situación límite.
Las medidas de ajuste con devaluación, aumento desproporcionado de las tarifas, caída del empleo, la pérdida del poder adquisitivo y el endeudamiento van de la mano con el cierre de fábricas, empresas, empresas de servicio, comercios, la destrucción de las economías regionales y el deterioro del mercado interno generando un espiral inflacionario que no se detiene, negociaciones paritarias con inaceptables condicionamientos, son parte de una política con sello neoliberal, que llevan a una reducción del consumo popular, achican salarios y jubilaciones y nos hace padecer, más que un ajuste económico, un verdadero estrangulamiento de nuestras condiciones de vida. Su fruto se destina a enriquecer a sectores amigables de poder, con las mineras, el juego, y las finanzas que se han beneficiado de quitas de retenciones y la desregulación de sus actividades.
El desarrollo del país requiere un Estado que establezca políticas capaces de promover y orientar las inversiones de favor de la producción, la generación de empleo, y la mejora de nuestra calidad de vida. Su ausencia, muy notable en nuestra región, hace se agrande y agrave diariamente el tejido social de quienes menos tienen y no cuentan con un empleo formal.
Además de vivir en viviendas precarias, no poseen los mínimos elementos vitales como luz, agua, gas y cloacas, sobreviviendo con tarjetas alimentarias de $ 273 por familia, donde ni los comedores comunitarios ni escolares cubren la gran demanda de las zonas postergas.
Es por todo ello que ante tanta preocupación por nuestro presente y futuro, Sindicatos, Movimientos Sociales y diversos sectores religiosos, coincidimos en este documento tomando como eje la reivindicaciones por las que históricamente venimos luchando y que el Papa Francisco ha sabido resumir en tres palabras: “Tierra, echo y trabajo” y llamamos, porque creemos es fundamental, a la unidad de todos los sectores para el proceso de lucha que consideramos inevitables si el gobierno persiste con este programa económico cuyos horizontes son más y peores medidas a las que ya se han adoptado en nuestro perjuicio.
Nuestra solidaridad con ellos que perdieron sus empleos o están en la incertidumbre de que va a suceder con ellos.
Rechazamos el aumento desproporcionado de tarifas y el proyecto que degrada las condiciones laborales y la vuelta al FMI que corrobora nuevamente nuestro sometimiento a los fondos buitres y políticas económicas inescrupulosas que no hacen más que hambrear y endeudar a nuestro pueblo.