La reciente comunicación del vocero presidencial, Manuel Adorni, sobre la disolución de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y la creación de un nuevo organismo que se denominaría Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) pone en jaque a un área que depende de la Dirección General de los Recursos de la Seguridad Social (AFIP) creada para prevenir, detectar y denunciar a empresas y personas que explotan a trabajadores y trabajadoras, niños y niñas y migrantes, todos ellos vulnerables.
Dicha Dirección General resulta ser uno de los principales organismos del Estado Nacional en el cumplimiento de la política pública que se venía llevando adelante para combatir el delito de trata de personas y asistir y proteger a sus víctimas y familiares. Dentro de la Dirección General de los Recursos de la Seguridad Social existe un área creada en el año 2020 con el fin de llevar adelante investigaciones tendientes a localizar personas explotadas laboralmente por inescrupulosos empresarios que buscan maximizar sus ganancias a costa de la Dignidad y los Derechos Humanos de las víctimas. Este área también recibe denuncias anónimas sobre casos de explotación laboral en sus diversas modalidades delictuales. Asimismo, la Dirección General de los Recursos de la Seguridad Social coordina operativos con otros organismos como el RENATRE, Ministerio de Trabajo de Nación y Secretarías de trabajo de las provincias con excelentes resultados. Solo con rastrear en internet se pueden verificar decenas de noticias dando cuenta de que el organismo detectó y denunció a varios empleadores y gracias a ello se pudo rescatar a muchas personas de la explotación laboral.
La posible disolución de la AFIP y de la Dirección General de los Recursos de la Seguridad Social derribaría el último bastión de esperanza para que aquellas personas invisibilizadas y explotadas puedan ser rescatadas de los explotadores.
El relato de la crónica de un desmantelamiento del Estado anunciado sigue avanzando velozmente y nadie sabe cuántos argentinos que sufren este flagelo serán abandonados a su suerte por este gobierno.
Desde La Alameda manifestamos nuestro repudio al desmantelamiento arbitrario e irracional de los organismos públicos que defienden la vida, la libertad, la dignidad y la justicia social.
Seguiremos luchando para enarbolar la bandera de los derechos humanos y la Dignidad de los trabajadores y trabajadoras. Seguiremos marchando para que ninguna persona quede abandonada al costado del camino por un gobierno que se hace el distraído. Sabemos –como dijo un gran poeta- que por más que intenten cortar todas las flores, no podrán evitar que regrese la primavera.