Se realizó este jueves 22 de junio un paro regional y movilización
MULTISECTORIAL CONTRA LA INSEGURIDAD Y LA VIOLENCIA EN ROSARIO
Frente a la escalada de graves hechos de violencia e inseguridad que estamos sufriendo los ciudadanos de la región, a los reiterados e incesantes actos de terrorismo narco que atentan directamente contra las instituciones públicas y privadas y contra la vida y tranquilidad de todos los rosarinos, nos manifestamos unidos en esta Multisectorial para decir BASTA, exigiendo a las autoridades municipales, provinciales y nacionales el urgente e inmediato delineamiento y ejecución de políticas públicas concretas que den un corte efectivo a este flagelo que crece día a día a niveles exponenciales.
Somos conscientes que la situación actual es la expresión de un escenario de crisis – económica, política e institucional- que se profundiza y que venimos sufriendo desde hace décadas. No obstante, nuestra región atraviesa hoy una problemática aún más compleja sobre la cual gran parte de la opinión pública tiene la firme convicción de que somos escenario de la disputa de los sectores de poder concentrado.
Por los puertos del gran Rosario, sobre la (mal llamada) Hidrovía Paraguay Paraná, se exportan más del 80% de nuestras riquezas y es a través de los cuales entra y sale el grueso del narcotráfico. Estos sectores, ligados a las grandes cadenas globales de valor, constituyen un entramado de poder que posibilita, entre otros, el negocio del narcotráfico.
Resulta necesario visibilizar y denunciar a los sectores económicos y financieros que blanquean y se enriquecen a costa de este sistema que genera cada día más desigualdad y violencia. A su vez la crisis económica, la desocupación y su consecuente falta de oportunidades y progreso, son el caldo de cultivo para que el negocio de la droga crezca echando raíces en la sociedad toda, contaminado todos los sectores y poderes públicos.
Nos encontramos ante uno de los más trágicos y difíciles momentos en la historia de la provincia de Santa Fe en materia de seguridad, hasta el punto en que se ha naturalizado el crimen organizado, siendo parte de nuestra vida cotidiana.
Las bandas narcocriminales han avanzado más allá de las disputas territoriales, ahora actuando como verdaderos terroristas mediante maniobras extorsivas intentan quedarse con la propiedad privada, llevando a cabo, con total impunidad, atentados contra escuelas, comercios, sindicatos y los propios trabajadores.
Es consideración generalizada que el narcodelito y su organización ha logrado infiltrarse en los tres poderes e incluso en la propia policía de la provincia de Santa Fe, la que claramente ha perdido el control de las calles. Nos encontramos presos en nuestros propios hogares, rogando volver a casa sanos y salvos, con los delincuentes libres en las calles sembrando pánico y miedo, y llevándose día a día la vida o la tranquilidad de algún ciudadano inocente.
Nos convocamos a pensarnos en colectivo, para activar lo que ya existe en las organizaciones y que permite pensar en otra realidad, otras relaciones sociales desde la amorosidad, la red en el territorio, la fuerza organizada. Esta es la continuidad de la Gran Marcha por la Paz realizada meses atrás y dentro del marco de una gran agenda de trabajo entre todas las organizaciones del pueblo.
Remarcamos (y que le quede claro a todos los políticos en campaña) que esta acción colectiva no tiene absolutamente ningún tipo de bandera política, REPUDIANDO Y RECHAZANDO a los que pretenden utilizar electoralmente ésta trágica situación.
Exigimos respuestas que garanticen la vida de las personas y que las intervenciones del Estado en sus diferentes niveles (ejecutivo, legislativo y judicial) garanticen una vida digna y con pleno ejercicio de los derechos humanos más básicos.
Exigimos que agudicen su inteligencia, las acciones no pueden simplificarse en que el problema de fondo de la “inseguridad” se resuelve sólo con más fuerzas federales, policiales y etc. patrullando las calles. (Medida que tampoco se ha puesto en ejecución en la medida suficiente).
Más seguridad es que todos tengamos un trabajo digno y bien remunerado, es tener luz y agua, vereda y cordón cuneta, desagüe, calles iluminadas y conexiones seguras y espacios verdes cuidados y seguros.
Más seguridad es inclusión social, más y mejor educación y salud pública. Más cultura y deportes.
Repudiamos los hechos de represión a la movilización popular en Jujuy y nos solidarizamos con todos los que luchan por sus condiciones de vida, libertad a los presos.
Hoy los sindicatos, las organizaciones sociales y políticas, los estudiantes, los pequeños y medianos comerciantes, las cámaras empresarias, las iglesias, las pastorales católicas y evangélicas, los movimientos ecuménicos, las familias, los espacios culturales, vecinales, clubes y ONG, la sociedad toda nos concentramos y movilizamos en Rosario.
Unidos debemos protegernos, si tocan a uno de nosotros, tocan a TODOS.
NO HABRÁ PAZ SIN JUSTICIA SOCIAL
POR UNA ROSARIO EN PAZ