Una luz de esperanza asoma entre los trabajadores del bar “La Lechería”, ubicado a metros de la Catedral Metropolitana, luego de que la administradora del inmueble se comprometiera a acordar el alquiler del lugar a una persona que desea seguir con el bar y con todos los empleados trabajando.
El comercio, situado en la calle San Martín 70 de la Capital Federal, reclaman desde hace dos semanas sus fuentes laborales, después de que la patronal, encabezada por Oscar Daniel Gómez , Raul Jorge Esterson y María del Carmen Linares, los dejara en la calle intentando llevarse todas las maquinarias y sin pagar ni sueldo adeudado, ni aguinaldo.
El histórico inmueble donde esta ubicada “La Lechería” pertenece a los Monjes Trapenses, con los cuales, los trabajadores junto a la Alameda han tomado contacto para poder llevar adelante este intento de solución. Los empleados, con un promedio de 30 años de antigüedad, de repente se vieron sin un plato de comida para llevar a sus familias.
Desde ese sábado 29 de octubre no abandonaron nunca más la puerta del bar, y mantienen una huelga pacifica en reclamo de lo que les corresponde.
Hasta ahora el reclamo, solo elevado al Ministerio de Trabajo, no prospera como esperan los trabajadores, mientras que la Justicia porteña solo acciona a favor de la ex patronal estafadora, encerrando dentro del Bar a algunos compañeros, impidiendo a los que están en la puerta poder entrar a cuidar los bienes de la ex empresa, tal vez su única posibilidad de cobrar algo.
Sin embargo, cuando parecía que no había solución, apareció una posible salida al conflicto.
Una de las clientas del bar, que conocía a los trabajadores hace años, les dijo que quería alquilar el inmueble conservando las fuentes laborales, una noticia que fue muy bien recibida por los trabajadores.
Según la administradora del inmueble, había otros interesados en alquilar, pero frente a la posibilidad de que el alquiler incluya la continuidad de las 26 familias en su puesto de trabajo, los trabajadores creen que la administración no va a dudar sobre quién tiene la prioridad.
Esperamos que rápidamente se pueda llegar a un acuerdo por el bien de los trabajadores, que hace mas de dos semanas sufren, no solo que los dejaron en la calle, sino también no poder volver a su casa por tener que quedarse frente al local en búsqueda de alguna solución frente a la estafa de sus 30 años de trabajo.
Se abre una luz de esperanza y todos estaremos siguiendo minuto a minuto cómo avanza.