Por primera vez en el Vaticano, con la presencia de delegados de más de 40 países del mundo, entre los que se encontró el legislador porteño de Bien Común, el partido de La Alameda, Gustavo Vera, se realizó este martes 7 y miércoles 8 de febrero un coloquio sobre tráfico de órganos y trasplantes.
Además de Vera, los representantes argentinos fueron el doctor Gabriel Gondolesi y María del Carmen Bacqué, presidenta del Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (INCUCAI).
Gondolesi es jefe de Cirugía General, jefe de Trasplante Hepático, Reno-Pancreático y de Unidad de Soporte Nutricional, Rehabilitación y Trasplante Instestinal en el Hospital Universitario Fundación Favaloro, pero además es investigador en Salud del Conicet y miembro del Instituto de Medicina Traslacional, Trasplante y Bioingeniería (IMETTYB) de la Universidad Favaloro-CONICET).
Entre los asistentes hubo médicos, profesores, científicos, periodistas, jueces, fiscales y otros profesionales de todo el mundo tratando este tema.
Vera destacó este coloquio, que se realiza en la Academia Pontificia de Ciencias que dirige monseñor Marcelo Sánchez Sorondo, ya que “es la primera vez” que se trata un tema de estas características “con la representación de más de 40 países” y explicó que se aborda “el tema del tráfico y la extracción ilícita de órganos, además de las distintas maniobras fraudulentas que se desarrollan en muchas regiones para aprovechar la vulnerabilidad de gente que es descartada y traficada”.
“Hay casos que, de alguna manera, por su desesperación económica se la convence de vender un órgano, atentando muchas veces contra su propia salud y en condiciones pésimas”, remarcó el también titular de La Alameda.
Vera sostuvo que durante este coloquio están “poniendo luz sobre esa cuestión, sobre las regulaciones y las leyes que existen y las experiencias positivas que hay en algunos países, con el objetivo de tratar de imitarlas y luchar contra este flagelo”.
“También estamos viendo los lugares donde existen regiones que son más vulnerables”, precisó el legislador de la Ciudad.
“ES UN CRIMEN CONTRA LA HUMANIDAD”
La declaración firmada como conclusión de la reunión sobre “Tráfico de órganos y turismo de trasplantes” requiere que “todas las naciones” investiguen crímenes relacionados al tema que “puedan estar ocurriendo o se hayan cometido en sus jurisdicciones o por ciudadanos residentes en sus países”, porque “es un crimen contra la huManidad, según la resolución firmada.
Los participantes del encuentro reivindicaron los “progresos” hechos en la materia por algunos países, entre ellos China, aunque cuestionaron que otros, como Estados Unidos y Turquía, “se mantienen como destinos de turismo de trasplante”.
“Los turistas de trasplantes van a destinos donde no existen legislaciones apropiadas para combatir estos crímenes y proteger a los pobres y vulnerables”, lamenta la declaración.
En el encuentro promovido por el Papa Francisco fue reivindicado que Argentina “es un país libre de tráfico de órganos” en el que “no hay ningún riesgo del denominado turismo de trasplantes”.
EL VATICANO QUIERE EL CAMBIO EN CHINA
Sánchez Sorondo sostuvo que la Academia Pontificia estudió mucho el caso de China y llegó a la conclusión que invitar a los delegados de ese país podría tener dos efectos: uno positivo y otro negativo.
“El efecto negativo es que alguien puede creer que invitando a China nosotros queramos cubrir las malas prácticas que son conocidas en ese país, pero no es así. Y el efecto positivo es reforzar la posición actual del gobierno chino, del presidente y de los ministros que quieren cambiar verdaderamente y respetar la dignidad humana en este campo, es decir no vender los órganos de los prisioneros como se hizo”, detalló Sánchez Sorondo.
Además, agregó: “Hay una evolución en esto, ellos quieren ser ayudados por la comunidad internacional y por la Iglesia, nosotros estamos muy contentos de esta actitud y creemos realmente que ellos quieren cambiar, que están cambiando”.
De todas maneras, el arzobispo argentino mantuvo prudencia y precisó: “Que ahora no se haga ningún trasplante de órganos ilegal en China esto no lo podemos decir, pero queremos fortalecer el movimiento del cambio”.
El Papa Francisco fue informado de la controversia y tuvo una reacción elocuente al asegurar que a todos se trata con misericordia y por eso se mantuvo la invitación a los funcionarios chinos, aunque se aclaró que espera gestos evidentes de transformación, por ejemplo “desmontar los quirófanos de las cárceles”.
UN COLOQUIO CON REPRESENTANTES DE 45 PAÍSES
Además, este coloquio cuenta con representación de unos 45 países como Brasil, México, Nigeria, Corea del Sur, Kuwait, Argentina, Colombia, España, Italia, Alemania, Francia, Israel, Rusia, Grecia, Japón, China, Suiza, Estados Unidos, Canadá, Turquía, Inglaterra, Suecia, Bélgica, Australia, Croacia, Polonia, Bulgaria, Costa Rica, Sudáfrica, Irlanda del Norte, Irán, Filipinas, India, Tailandia, Moldavia, Kosovo, Pakistán, Nicaragua, Guatemala, Qatar, Arabia Saudita, Libia, Singapur, Vietnam y Afganistán.