El legislador porteño y titular de la Comisión de Trata, Gustavo Vera, sostuvo que el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, “tendría que haberle pedido la declaración jurada al nuevo jefe de la Policía de la Ciudad, José Potocar, y a sus familiares directos” al remarcar que “seguramente se van a encontrar yates, mansiones o propiedades que no se pueden justificar con su salario”.

El líder de Bien Común, el partido de la Alameda afirmó que Potocar es un jefe de la Policía Federal “designado del entorno de Guillermo Calviño”, jefe de los traspasados a la Ciudad hasta el 31 de diciembre pasado que se encuentra investigado en distintas causas penales por encubrimiento a policías corruptos y protección de un jefe de la barra brava de Boca Juniors.

“Es gente designada del entorno de Calviño. Rodríguez Larreta debería haberle pedido la declaración jurada, no solo a él sino a todos los jefes y a sus familiares directos para sacarnos la duda. Seguro vas a encontrar yates, mansiones y propiedades que no se pueden justificar con el salario”, indicó Vera en declaraciones al programa “La era de los Mauricios”, que se emite por radio Splendid.

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Vera consideró que con la designación de Potocar como jefe de la Policía de la Ciudad “se está premiando a comisarios a los que ni siquiera se les pidió la declaración jurada y se está desplazando a comisarios que demostraron tener profesionalidad”, en referencia a Horacio Giménez y Ricardo Pedace, jefe y subjefe de la Policía Metropolitana hasta el 30 de diciembre pasado.

El presidente de la Comisión de Trata en la Legislatura porteña sostuvo que investigaron “en 2008 desde adentro la división de Trata de la Policía Federal con Nancy Miño” y agregó Vera que denunciaron “el año pasado, con un informe de 400 páginas, cómo era el entramado de las cocinas de clorhidrato de cocaína en la Villa 1-11-14”.

“Los hechos nos están demostrando que teníamos razón. Trabajamos con un montón de vecinos que acercaron puntos de venta y otros datos vitales para la causa”, precisó el legislador.

Asimismo, el titular de la Alameda indicó que “había cinco comisarías ‘entongadas’ desde el jefe de la brigada hacia arriba”, al tiempo que señaló que “la Policía Federal es rescatable desde principal hacia abajo, o sea un 80 por ciento”.

“Por eso hay que pedir las declaraciones juradas y que empiecen a explicar su patrimonio. De principal para abajo hay un montón de gente muy honesta que arriesga su vida todos los días y la está pasando mal”, indicó

EL RECONOCIMIENTO A LA POLICÍA METROPOLITANA

Vera criticó la disolución de la Policía Metropolitana, que pasó a formar parte de la nueva Policía de la Ciudad, al señalar que la fuerza porteña “mostró un nivel de profesionalismo en la investigación del crimen organizado, el narcotráfico, la trata de personas y otros”.

“Uno puede discrepar con algunos procedimientos que hizo la Metropolitana, como el del Hospital Borda o el del barrio Papa Francisco en Villa Lugano, pero lo cierto es que si preguntás en cualquier Juzgado Federal te van a decir que la Metropolitana y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) son las fuerzas en las que más confían para investigaciones complejas”, reveló.

LA CAPITAL ES UNA ZONA LIBERADA DESDE HACE AÑOS

Vera indicó que “toda la Capital Federal está liberada porque hace unos 10 o 12 años se resolvió puertas para adentro de la Policía, y con anuencia de la política y un sector de la Justicia, profesionalizar y verticalizar el sistema de recaudación mafiosa, que antes eran nichos ocasionales y ahora se convirtieron en una gangrena sistémica”.

“En todas las comisarías los jefes de brigadas, subcomisarios y comisario participan de la recaudación en negro, que significa talleres clandestinos, prostíbulos, lugares mal habilitados, algunas zonas que en determinados horarios se liberan para el delito, en Flores con el clorhidrato de cocaína”, explicó.

Además, prosiguió: “Nosotros hemos tenido mucha experiencia y han caído más de 60 comisarios producto de nuestras denuncias, pero lamentablemente ninguno fue preso sino que todos estuvieron en disponibilidad y cobrando sueldos. Luego los mandan a otro lado porque son el fusible, pero terminan volviendo a las comisarías”.

Vera explicó que descubrieron “a lo largo del tiempo y luego de cientos de denuncias judiciales que esto no era un episodio ocasional, sino un sistema bastante aceitado”.

“Por eso un policía federal honesto, entre los oficiales llega a principal y pide la baja, porque si entra en el equipo de una brigada debe recaudar a la fuerza. Y eso no es solo para ellos, sino también para gastos corrientes de la comisaría, para una parte de la Justicia y la política”, detalló.

“FLORES, LA PUNTA DEL ICEBERG”

El legislador porteño de Bien Común advirtió que el barrio porteño de Flores se convirtió “en la punta del iceberg más intensa, porque al haberse reducido el consumo de estupefaciente en el mercado interno, como consecuencia del ajuste que también sufrió la economía criminal, muchos de los que se encargaban de ser ‘campana’ o acopiaban armas o drogas, con un ingreso estable, ahora dejaron de tenerlo y salieron a robar por el barrio que tienen mas cerca y que es Flores”.

“Me refiero a las 10 cocinas de clorhidrato de cocaína que maneja Marco Estrada”, añadió el titular de La Alameda.

Por otra parte, remarcó que las fuerzas de seguridad “van a tener mucho equipamiento por parte de Israel, ya que (la ministra de Seguridad de la Nación) Patricia Bullrich está haciendo negocios que son  muy importante, pero con precios que son exorbitantes en el mercado mundial, en lo que respecta a los chalecos antibalas, armas y otros”.

“Algún día habrá que poner la lupa sobre esos sobreprecios que generosamente paga Patricia Bullrich a Benjamin Netanyahu para tener armamentos y equipamientos para las diferentes fuerzas de seguridad”, planteó.

PALO PARA KRAVETZ

Vera remarcó que el secretario de Seguridad de Lanús, Diego Kravetz, “no coincide” con su diagnóstico sobre las “cajas negras” de la Policía Federal, porque “cuando fue jefe del bloque de legisladores porteños del Frente para la Victoria se masificaron las recaudaciones mafiosas”.

“En 2007 me citó en su despacho para ofrecerme apoyo al trabajo de nuestra cooperativa si nos dejábamos de romper las bolas con denunciar los prostíbulos y la trata. Era algo que le molestaba en 2007, así que habrá que preguntarle por qué le molestaba”, reveló Vera.

Por último, agregó: “Kravetz era abogado de fábricas recuperadas y lo llevó Miguel Bonasso como diputado a la Ciudad. Después pasó al Frente para la Victoria y después presidente del bloque del FpV, así que todas las negociaciones  sistemáticas del Frente para la Victoria con el gobierno de turno, primero Aníbal Ibarra, luego Jorge Telerman y después el PRO, las lideraba el propio Kravetz. Él conoce muy bien como funcionan las comisarías, incluso mejor que yo”.

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