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ni esclavos ni excluidos

Organizaciones coercitivas con fines de explotación. El caso de la secta “Montenegro” de Bariloche.


Desde hace varios años la Alameda, junto a otras organizaciones de la sociedad civil y sectores comprometidos de la justicia,  advertimos la presencia cada vez más frecuente de organizaciones coercitivas, popularmente denominadas sectas, con fines de explotación. Estas redes se aprovechan de la vulnerabilidad y utilizan la fachada de supuestas organizaciones filosóficas, religiosas o terapéuticas.

La articulación entre la Fundación Alameda, la Protex (Procuraduría de Trata y Explotación de Personas), AJUFE (Asociación de Jueces Federales  de la República Argentina) y la Red Libre Mente permitió sistematizar y elaborar el primer material destinado al público general para caracterizar y detectar a estas organizaciones, las cuales, a través de la manipulación psicológica de las personas -generalmente vulnerables tanto psicológica, social, afectiva como económicamente-, suelen caer bajo la manipulación y dominio de su voluntad de un supuesto “líder”.  El “líder” suele persuadir mediante diversas formas para adueñarse de la voluntad de la víctima. La víctima no se da cuenta que está siendo paulatina y metódicamente apartada de sus seres queridos -amigos, familiares, etc.- mediante lo que comúnmente se conoce como “lavado de cerebro” para luego ser explotada sexualmente y/o laboralmente. El “líder” o “líderes” logra persuadir a sus víctimas que es o son personas con un don especial de origen -generalmente- espiritual y las organizaciones cuentan con una estructura orgánica que trabaja y protege al “líder” con absoluta sumisión a su autoridad.

En la Argentina ya se han realizado varias denuncias penales por trata de personas con fines de explotación contra los “líderes” y la estructura jerárquica. Solo para nombrar algunos casos que tomaron notoriedad pública podemos mencionar la organización “ABBA KRISHNA” , la secta religiosa “TEMPLO FILADELFIA” , la secta “YOGI” , secta “HOTEL CITY”  y el actual caso de la secta “MONTENEGRO”  que fue recientemente desarticulada por la justicia federal, que inicialmente ordenó la detención de al menos 21 personas -entre la que se encuentra el “líder”. Es decir, estas organizaciones que esconden fines de explotación laboral o sexual pueden disimularse a través de organizaciones pseudo filosóficas, pseudo religiosas o pseudo terapéuticas.

En referencia a la secta localizada en Bariloche y que cobró notoriedad en los últimos días, se sabe que la mayoría de las personas eran de nacionalidad rusa, pero también había mujeres de nacionalidad brasileña y mexicana. El “líder” del culto había fundado una organización coercitiva en Rusia durante los 90, en ese mismo país había sido sentenciado a  una pena de 11 años por abuso sexual y huyó de la República Montenegrina.

La secta fue denunciada luego de que personal dependiente del Hospital Zonal Doctor Ramón Carrillo de San Carlos de Bariloche atendiera a una joven mujer rusa al momento del nacimiento de su hijo. Si bien su pasaporte acreditaba que la joven contaría con 22 años, su aspecto físico la demostraba de apenas 15 años. Pero lo que más llamó la atención al personal del nosocomio fue que la joven embarazada siempre iba acompañada por dos mujeres que anulaban su voluntad por completo. Al momento de dar a luz, la joven de nacionalidad rusa habría elegido un nombre que no era del agrado de las mujeres que la acompañaban y ellas eligieron cómo se debería llamar el niño. Ese hecho terminó de convencer a los médicos que debían dar intervención a la justicia, lo que derivó inicialmente en las detenciones de todos los miembros de la organización y el descubrimiento de que en la Argentina funcionaría una secta que había tenido su apogeo en Europa, Montenegro, en los años 90.

La joven madre y su hijo se encuentran a salvo gracias a los médicos y enfermeros que tuvieron la valentía de realizar la denuncia y a que estaban alertas a los indicadores del delito de trata de personas. También, al rápido accionar de la justicia federal que ordenó la aplicación del Protocolo Único de Articulación elaborado por el Comité Ejecutivo de Lucha contra la Trata de Personas durante la gestión 2020-2023, el cual garantiza a las víctimas del delito, su rescate, acompañamiento y asistencia por parte de las autoridades nacionales y provinciales durante todo el proceso judicial.

A la fecha, las 20 personas que presuntamente forman parte de la organización criminal fueron liberadas, aunque les prohibieron salir del país, la obligación de fijar domicilio y presentarse cada 7 días en dependencia policial, la retención de sus pasaportes,  y la prohibición de contacto con la madre y su bebé. Asimismo, se determinó la prisión preventiva por 60 días del líder de la secta que, a su vez, está acusado de ser el cabecilla de una organización criminal transnacional de caracter coercitivo que, con fines de trata sexual y reducción a la servidumbre, captó a una joven de 22 años de extrema vulnerabilidad  en Rusia y la traslado a Río Negro.

Es importante recordar que la Trata de Personas no es un delito invisible, pero muchas veces nos sabemos reconocerla. Para combatirla todos debemos comprometernos a concientizar a través de charlas con nuestros amigos, hijos y familiares. Con esto podemos evitar que sean víctimas de personas inescrupulosas que lo único que buscan es maximizar sus beneficios económicos a costa del sufrimiento de otros. Pero también importante reconocerla y denunciarla, como estos valientes profesionales de la salud del Hospital Zonal Doctor Ramón Carrillo de San Carlos de Bariloche.

Aprovechamos esta dolorosa oportunidad para reiterar aquellos parámetros que pueden indicarnos que estamos frente a una organización coercitiva, popularmente conocida como secta, con fines de explotación. Poniendo de relieve la necesidad de garantizar el derecho constitucional de reunirse y de la libertad de culto.

Los parámetros que se detallan a continuación, constituyeron el primer material elaborado desde la órbita estatal, durante la gestión del Comité de Lucha contra la Trata y Explotación de Personas 2020-2023, y puesto a disposición de la comunidad. Supuso un largo proceso a partir de sistematizar los hechos que se habían producido en distintas causas judiciales y los denominadores comunes que reúnen este tipo de organizaciones con formato de secta.

Características de las organizaciones coercitivas:
* Grupos jerarquizados.
* Líder o gurú que ha recibido un legado trascendente e incuestionable.
* Doctrina.
* Institucionalización del dominio y el control.
* Demanda progresiva de absoluta sumisión a la autoridad.
* Imposición de una realidad mediante la descalificación de otras realidades.
* Imposición de un modelo de transformación estándar de las personas.
* Seducir y emitir falsas promesas.
* Ocultamiento de la finalidad de la explotación de las personas.
* Aislamiento social y pérdida de identidad.
* Ocultamiento del carácter autoritario / totalitario.
* Ocultamiento de otros fines delictivos.
* Aprovechamiento de la vulnerabilidad.

Para detectar los casos, se recomienda considerar como indicadores de riesgo:

* Dependencia psicológica o emocional.
* Dinámicas grupales abusivas.
* Restricción de la libertad: control de movimientos o relaciones con el exterior.
* Encierros prolongados como parte de tratamientos o aprendizajes.
* Cambios en la personalidad.
* Ruptura inducida con el entorno de origen.
* Destrucción total o severa de los lazos afectivos.
* Promesas de tratamientos médicos, curativos o “milagrosos”.
* Trabajo no remunerado.
* Pérdida de la administración de su dinero o bienes.
* Pérdida o disminución patrimonial.
* Imposición de castigos, multas físicas o dinerarias

A su vez, la campaña elaborada por el Comité  Ejecutivo de Lucha contra la Trata y Explotación de Personas, durante el período 2020-2023 advierte de los daños en las personas:

* Salud mental: estrés postraumático, trastorno disociativo, agravamiento de trastornos previos.
* Problemas Emocionales: ansiedad, miedo, culpa, síntomas depresivos, infantilización.
* Alteraciones Cognitivas: rigidez mental, reducción de la flexibilidad y adaptabilidad cognitiva, disminución del pensamiento crítico e independiente, pensamientos obsesivos o paranoides.
* Alteraciones de la conducta sexual: situaciones de abuso, restricciones, imposición de normas o prácticas ritualistas, fomento de la promiscuidad, represión de identidad y/o de la orientación sexual.
* Daños en la estructura familiar o red social: destrucción total o severa de los lazos afectivos y de comunicación de la persona con su entorno social habitual.
* Daños socio-laborales: abandono de profesión u oficio, problemas de rendimiento laboral, dificultades de adaptación social y laboral.
* Daños patrimoniales: pérdida de ingresos por desvíos a la organización por distintos métodos, trabajo sin remuneración, pérdida de bienes y recursos materiales, endeudamiento a raíz de prácticas coercitivas extremas o suicidios inducidos.
* Abuso y explotación: Posibles abusos o situaciones de explotación sexual y/o laboral.
* Muerte: a raíz de prácticas coercitivas extremas o suicidios inducidos.

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